9/6/11

Lunes. Un lunes cualquiera. 17:31.

            Sentada en uno de los escalones que había junto a la puerta de una tienda, ella esperaba a que él llegase. Cinco minutos mas tarde él llego, tenía los ojos más brillantes de lo normal, el marrón intenso de sus ojos hacía que ella se estremeciera con tan solo una corta mirada. Él la beso en los labios, un beso corto y suave, como siempre hacían al encontrarse. Ninguna palabra. Él le agarró de la mano y dejo escapar una de sus perfectas sonrisas. Ella se levantó, y le siguió. La llevo hasta su portal, una vez en el ascensor, ella le pregunto:
- ¿Están tus padres en casa?
- Sí, pero da igual… - No acabó la frase, no pudo, estaba demasiado ocupado besando el cuello de la chica.

            Ya estaban en su cuarto, él iba rápido, pero a ella no le importaba. Se sentía a gusto con él, iba a ser su primera vez con el chico que tanto le gustaba, y a quien de verdad quería. Él se puso encima, la miro, se acerco a sus labios, y antes de besarla, preguntó:
- ¿Segura?
- No. – Contesto ella, pero se echo a reír y acabó el beso que él iba a darle.

            Calor, nervios, risas, besos, manos, más besos…


                                                                     Onintza,♥


               


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